Monterrey continúa sufriendo las consecuencias del abandono y el mal desempeño en materia de Obras Públicas que tuvieron las pasadas administraciones municipales.
Basta con recordar la falta de proyectos de infraestructura vial, pluvial y de espacios públicos que hubo durante las gestiones de Margarita Arellanes y Adrián de la Garza.
La falta de obras viales se ha visto reflejada por un lado en la falta de alternativas y caos vial prácticamente a todas horas y todos los días.
A eso se suma la falta de mantenimientos de las vialidades existentes, basta con ver el estado en el que se encuentran los pasos a nivel y desnivel, como los de Garza Sada, Gonzalitos y Leones, algunos de los cuales afortunadamente ya están siendo rehabilitados.
No olvidar la proliferación de baches durante la gestión de Arellanes y el fallido programa «Vialidades Regias» de Adrián de la Garza, el cual ha sido cuestionado por la falta de transparencia en el manejo del millonario presupuesto que se le destino y la falta de resultados.
Asimismo hay que destacar la falta de inversión en obras pluviales, lo cual ha traído inundaciones y encharcamientos que se dan con cualquier lluvia por mínima que sea, dejando consigo no solo daños materiales sino situaciones más graves.
Uno de los ejemplos más llamativos de este rubro es el caso de la red pluvial Luis Echeverría, localizada en la zona norte de Monterrey, la cual duró cerca de 10 años sin terminar, en tanto que la actual administración municipal ya trabaja en la obra para concluirla definitivamente.
En cuanto a espacios públicos, estos no solo no se crearon sino que los existentes se fueron dejando en el olvido.
Durante las pasadas administraciones municipales de Monterrey brillaron por su ausencia las inauguraciones o rehabilitaciones de parques y espacios deportivos, en perjuicio de la población.